Bienvenidas a todas.

Se que hoy estas aqui por que en el fondo sabes que puedes escribir una historia diferente.

Pero cómo escribirla si no te conoces y no conoces todo aquello que te lo impide. Para escribir una historia diferente conoce como las heridas emocionales han influido en tu vida.

Las heridas emocionales que se experimentan durante la infancia pueden tener un efecto duradero en la vida adulta. Si no se abordan, estas heridas pueden afectar profundamente la capacidad de una persona para tener relaciones sanas, confiar en los demás, manejar el estrés y sentirse satisfecho con la vida en general. Por esta razón, es importante sanar las heridas de la infancia para poder llevar una vida plena y feliz. 

Aquí te presento algunas razones específicas de por qué es importante sanar nuestras heridas emocionales de la infancia:

1. Mejora la autoestima: Cuando una persona vive con heridas emocionales sin sanar, puede desarrollar creencias negativas sobre sí misma. Sanar estas heridas puede ayudar a la persona a mejorar su autoestima y a creer más en sí misma.

2. Aumenta la capacidad de amar: Las heridas emocionales pueden dificultar que una persona tenga una relación amorosa sana en la edad adulta. Sanar estas heridas puede aumentar la capacidad de amar y establecer relaciones más sanas y duraderas.

3. Produce una sensación de paz interior: Las heridas emocionales pueden generar ansiedad, miedo y estrés. Sanar estas heridas puede generar una sensación de paz interior y tranquilidad.

4. Permite establecer límites saludables: Las personas que han sufrido heridas emocionales pueden tener dificultades para establecer límites saludables. Sanar estas heridas puede ayudar a la persona a tener una mayor claridad sobre lo que necesita y a establecer límites sanos en sus relaciones.

5. Promueve la autorregulación emocional: Las heridas emocionales sin sanar pueden generar desregulación emocional. Sanar estas heridas puede ayudar a la persona a tener un mayor control emocional y a regular mejor sus emociones para responder de manera saludable a las situaciones estresantes.

En resumen, sanar las heridas emocionales de la infancia es fundamental para tener una vida plena y feliz en la edad adulta. Si se trabaja en las mismas, se puede mejorar la autoestima, incrementar la capacidad de amar, producir una sensación de paz interior, establecer límites y mejorar tu salud.

con cariño karla doncel.